Hepatitis aguda grave de origen desconocido en la era de la COVID-19

Señor Director:

En la actualidad, a nivel global continúa la pandemia de la COVID-19; los casos asociados a nuevas variantes de coronavirus han aumentado exponencialmente, de ahí que entre cepas cambie la capacidad de contagio o la virulencia. Este escenario favorece, desde la perspectiva y experiencia de los investigadores, la aparición de futuras pandemias; lo cual es inevitable.

El 5 de abril de 2022, el Punto Focal Nacional (NFP) del Reino Unido para el Reglamento Sanitario Internacional (RSI) notificó a la OMS diez casos de hepatitis aguda grave de etiología desconocida, en niños pequeños previamente sanos, en edades entre los 11 meses y los cinco años, en el centro de Escocia.1 Hasta el 29 julio de 2022, se habían notificado más de 1 000 casos probables de hepatitis aguda de causa desconocida en todo el mundo,2 con presencia de casos en tres continentes diferentes (Europa, América del Norte y Asia).

Los datos revelan una alta concentración de casos en Europa, Reino Unido (273 casos) y Estados Unidos (109). Aunque en menor cuantía, otros países reportan la presencia de estos casos: Argentina (8), Brasil (16), Canadá (7), Costa Rica (2), Indonesia (15), Israel (12), Japón (7), mientras que Panamá, Palestina, Servia, Singapur y Corea del Sur, reportan un caso cada uno.1

La hepatitis es una inflamación del hígado causada por una variedad de virus y agentes no infecciosos que provocan varios problemas de salud, algunos fatales. Hay cinco cepas principales del virus de la hepatitis, denominadas tipos A, B, C, D y E. Si bien todas causan enfermedades hepáticas, difieren en los modos de transmisión, la gravedad de la enfermedad, la distribución geográfica y la prevención. En particular, los tipos B y C provocan enfermedades crónicas en cientos de millones de personas, y juntos son la causa más común de cirrosis hepática, cáncer de hígado y muertes relacionadas con la hepatitis viral.3

La etiología y los mecanismos patogénicos de la enfermedad aún están bajo investigación. (4,5) Las hipótesis iniciales del equipo de incidentes del Reino Unido sobre la etiología de los casos se centraron en un agente infeccioso o una posible exposición tóxica. No se identificó ningún vínculo con la vacuna COVID-19 y la información detallada recopilada a través de un cuestionario a los casos sobre alimentos, bebidas y hábitos personales no identificó ninguna exposición común. Las investigaciones toxicológicas están en curso, pero se considera más probable una etiología infecciosa dado el cuadro epidemiológico y las características clínicas de los casos.6

El subtipo 41 de adenovirus (41F), parecen ser la explicación más posible, alrededor del 70 % de los casos (según una rueda de prensa de la OMS del 10 de mayo) fueron positivos.4) Se han propuesto varias hipótesis, cambios de la patogenia de los adenovirus para causar hepatitis en niños sanos:5

  • Un déficit inmunológico por falta de exposición a patógenos durante la pandemia de COVID-19 podría haber convertido a los niños más susceptibles a la infección por adenovirus y los desenlaces raros de la infección.

  • Como ocurrió con otros virus respiratorios, la “relajación de las restricciones de la pandemia” podría haber llevado a una ola masiva de infecciones por adenovirus, con desenlaces más raros de la infección.

  • Una infección anterior o una coinfección (con SARS-CoV-2 o un patógeno alternativo), o la exposición a una toxina, un fármaco o un factor ambiental, han alterado la respuesta del huésped a la infección por adenovirus.

Las manifestaciones clínicas de los casos identificados corresponden a una hepatitis aguda con transaminasas elevadas, la mayoría de los casos presentaron síntomas gastrointestinales, que incluyeron ictericia (71 %), vómitos (63 %), heces pálidas (50 %) y diarrea (45 %). La fiebre (31 %) y los síntomas respiratorios (19 %) con menos frecuencia.7 Más de 20 niños han requerido trasplantes hepáticos y fueron notificadas once muertes, de ellas cinco en Indonesia, una en Palestina y cinco en Estados Unidos.2

En la actualidad aún no se cuenta con evidencia suficiente sobre la hepatitis aguda grave de origen desconocido en niños. Se examinan posibles causas, además se necesitan más investigaciones para formular argumentos sólidos. Hoy, como nunca antes, es imprescindible aplicar los conceptos de medicina de precisión, identificación temprana de casos y tomar decisiones terapéuticas apropiadas.

Notas al pie:
  • Los autores declaran que no recibieron financiación para el desarrollo del presente artículo.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Historial:
  • » Recibido: 16/08/2022
  • » Aceptado: 31/08/2022
  • » Publicado : 01/09/2022


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